Aún se pueden ver las suelas de goma de las ruedas con las que se hacían las alpargatas, algún que otro zapato y lo que parece una bota.Treinta y tres cadáveres se amontonan uno encima de otro en un espacio de ocho metros de largo y dos y medio de ancho. Han encontrado hasta ocho más, que ya han exhumado, y todavía tienen que seguir excavando más abajo. Donde la tierra casi se funde con el hueso.