Ocurrió hace 43 años, el 3 de abril de 1973. “ Ese día murió Manuel Fernández Márquez, Obrero. Pero no de cansancio, como morimos muchos. Pero no de accidente de trabajo, como seguimos muriendo. Pero no de hambre y de miedo, como quisieran que muriésemos. Murió por gritar que no quería morir por nada de eso. Murió por gritar “Yo soy yo y mis compañeros”. Así empezaba el poema que un compañero de trabajo comenzó a leer en el funeral y que no pudo acabar porque la policía arremetió contra la multitud congregada para repudiar el crimen.