La Querella Argentina contra los crímenes del franquismo es mucho más que un proceso de justicia, tiene un valor muy importante en la recuperación del relato histórico y en la recuperación de una memoria colectiva, hasta ahora relegada por la Transición y la Ley de Memoria Histórica al ámbito privado y al pasado. Como prueba el verdadero nombre de esta Ley: «por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil y la dictadura”.