Un joven historiador murciano recupera la memoria de una de las mayores infraestructuras hidráulicas del franquismo, el embalse del Cenajo, en cuyas obras trabajaron cientos de presos políticos durante más de veinte años
Un joven historiador murciano recupera la memoria de una de las mayores infraestructuras hidráulicas del franquismo, el embalse del Cenajo, en cuyas obras trabajaron cientos de presos políticos durante más de veinte años