La Justicia lo investiga; no la española, la argentina; la española no está en eso. Dos ajusticiamientos a garrote vil, cinco fusilados ante pelotones voluntarios de la muerte y cinco muertos por defender sus derechos laborales, tiroteados por una policía conformada por secuaces al servicio del fascismo de la época. Doce muertos heroicos, asesinatos inmisericordes, por el régimen franquista, que hoy, el gobierno español encubre, protege a sus responsables y se convierte en cómplice.